Rivadavia terminó perdiendo dos puntos

Argentino “A”:  Rivadavia ganaba con un golazo de Cabral, sin embargo se retrazó en el campo y dejó que Cipolletti se le viniera. La historia terminó empatada más por méritos albirrojos que por intenciones albinegras. El fin de semana Rivadavia viaja a Mar del Plata para visitar a Unión.

 Rivadavia dejó escapar la gran chance de posicionarse bien arriba y de lograr su tercera victoria consecutiva en el Argentino “A” el domingo al empatar en un tanto ante el discreto Cipolletti de Río Negro.
El equipo de Pirez  fue levemente superior a su rival a lo largo de los noventa minutos y esto se demuestra con las situaciones que  generó frente al arco de Ruiz ya que alcanzan los dedos de una mano para enumerar las chances del local. En este aspecto el albirrojo tuvo la primera ocasión a los 4´ en un envío de Cabral defectuoso; luego de ese intento el elenco de Pirez solo se aproximó al arco de Ruiz. Cipolletti tuvo una respuesta futbolística a los 28´ con un remate de Henri Sáez apenas desviado y cuando el partido entraba en una mediocridad inusitada, el albirrojo diagramó la mejor jugada colectiva del partido y estableció la apertura del marcador. Se jugaban 35´, Jonatan García tocó para Ferrara, este le devolvió una buena pared al volante que metió un gran pase para el goleador Cabral que definió con tremenda categoría. 1 a 0 y delirio en el Coliseo.
En el complemento el elenco de Lorenzo Frutos salió con otra predisposición al terreno. Presionar a Rivadavia, quitarle el balón y atacar por las puntas era la intención, pero nada de esto ocurrió y Cipolletti tuvo que conformarse con la entrega de los hombres y a la cual le pudo sacar provecho gracias también al quedo futbolístico de Rivadavia.
La mínima diferencia no era ventaja para el local y esto lo sabían propios y extraños en el Coliseo por eso no extrañó que en la única jugada peligrosa la visita consiga la igualdad. Transcurría el minuto 27  cuando Gutiérrez desbordó a Macias y metió un gran centro rasante para el ingreso del defensor Muñoz. 1 a 1 y silencio en el Coliseo.
Los últimos minutos fueron de Rivadavia pero la iniciativa por lograr la victoria fue con más empuje que fútbol por parte de los jugadores y esto hizo que los que atacaban terminasen chocando con Muñoz, Ballesteros y Cia. El pitazo del árbitro Tello sentenció el final y el empate para Rivadavia, que tenía todo para conseguir su tercer triunfo en el certamen pero que dejó escapar por sus propias falencias.
Ahora llegará el momento de analizar lo que se hizo mal y cambiar en pos de visitar a un rival que será un hueso duro de roer como lo es Unión en Mar del Plata.